Grupos privados están activamente en campaña en contra del uso de etiquetas de RFID en ítems de consumo masivo, reclamando que invaden la privacidad del consumidor.
¿Cuáles son las principales preocupaciones relacionadas con la privacidad?
• Las etiquetas pueden emitir información personal que puede interceptarse. Es decir, se adquieren hábitos, recetas médicas, etc.
• ¿Quién controla la información proveniente de los sistemas RFID?
• ¿Cómo se emplean los datos?
Cuestiones de ética comercial:
• Las etiquetas RFID que se utilizan en tarjetas de pago / de membresía podría almacenar información que, al descubrirse, podría utilizarse para fines no planeados de antemano.
• La comunidad RFID se ha presentado en sociedad pero sin incluir al público en general.
• La tecnología, en sí misma, no es invasiva. El problema reside en cómo se utilizan los datos una vez recopilados. La comunidad RFID ha demostrado cierta lentitud en el tratamiento de estas cuestiones y en tranquilizar a la opinión pública en general.
Cuestiones personales:
• Uso de información proveniente de etiquetas RFID para descubrir identidad y preferencias personales, acciones del consumidor, y ubicación.
• Mucha de la información cuya revelación temen los consumidores es exactamente el tipo de información que las compañías querrían tener para captar mercados y distribución así como para detectar tendencias.
• La preocupación principal consiste en que la identidad de la persona podría estar unida a los datos demográficos recolectados.
Existe una concepción equivocada sobre la tecnología RFID, en relación a la vulnerabilidad de las etiquetas comparada con otros métodos de identificación.
La información que actualmente contienen los tags RFID es menor a la que usted puede leer en una etiqueta de código de barras. La primera generación de chips supera los 128 bits de memoria. La segunda generación tendrá típicamente 512 bits (32 palabras aproximadamente). Los chips de RFID nunca fueron diseñados para acumular toda la información acerca de un producto. Ellos almacenan números seriales que no tienen ningún valor por sí mismos. Si alguien quisiera leer y descifrar los contenidos de un chip, necesitaría tener acceso a las bases de datos de la cadena de abastecimientos, las cuales están típicamente protegidas para la obtención de información descriptiva sobre el ítem, su fabricante, destino, costo, etc.
Las medidas de seguridad mencionadas pueden ser vulnerables, pero proveen una mejora significativa sobre el código de barras. Cualquier persona que posea una impresora láser puede escanear el código de barras de un ítem de bajo costo, imprimir copias y pegarlas en un ítem de alto precio en un supermercado para pagar de menos. Es evidente que violar un lector de etiquetas RFID resulta más complejo que falsificar una etiqueta de código de barras.
Por el contrario, RFID incrementará la detección automática y la prevención de pérdidas dentro de la cadena de abastecimiento. En el nivel de pallet, cajas y eventualmente a nivel de ítems, RFID reducirá las pérdidas generadas por una pobre reposición de productos y por robos internos y externos. La validación de códigos EPC está siendo utilizada para aplicaciones de trazabilidad en la industria farmacéutica con el objeto de detectar la falsificación de medicamentos y drogas. En el comercio minorista, RFID se utiliza para registrar automáticamente al comprador, brindando mayor seguridad al comprador a efectos de la garantía del producto, reembolsos y devoluciones.
Existe suficiente conocimiento práctico desarrollado en los últimos años para ayudar a todas las compañías a adoptar un acercamiento serio y profesional a la tecnología RFID. Las principales ideas equivocadas sobre la tecnología se aclaran a continuación:
Rango de Lectura: Las etiquetas UHF son pasivas, por lo tanto, tienen un rango de lectura menor a los 10 metros, y su uso dentro de la cadena de abastecimientos no constituye una invasión a la privacidad o una tentativa por espiar las privacidades individuales.
Lectura y escritura en movimiento: Las etiquetas RFID casi siempre se leen a alta velocidad pero ciertamente no son escritas del mismo modo. El rango de programación de la etiqueta es 30 por ciento menor al de lectura. El tag necesita ser primero programado antes de responder al subsiguiente programa de lectura en velocidad. La mayoría de las implementaciones de etiqueta UHF pasivas usan una impresora / codificadora en el pro-grama inicial, y luego usan la etiqueta en modo de “sólo lectura”.
Las empresas son cada vez más conscientes acerca de la importancia de obtener una lectura confiable de la etiqueta en cada punto de la cadena de abastecimientos, sabiendo que ellas pueden utilizar bases de datos externas para realizar el seguimiento de su estado.
Reemplazante del Código de barras: RFID tiene numerosas ventajas sobre el código de barras, entre ellas, la de acelerar el movimiento de materiales y crear cadenas de abastecimiento más eficientes. Donde estos objetivos se alcancen, RFID reemplazará al código de barra y a otras tecnologías de identificación automática. Sin embargo, RFID nunca reemplazará a las etiquetas visibles y a la identificación de productos que ayuda a los trabajadores en la dentificación de contenidos y en el cumplimiento de su trabajo. El código de barras tiene sus limitaciones, pero mientras continúe siendo utilizado en el envase por parte del consumidor y mientras la infraestructura de código de barras siga proveyendo beneficios, continuará siendo utilizado durante muchos años.